El eclipse total de Sol es uno de los fenómenos más fascinantes de la naturaleza. Desde que el hombre bajó de los árboles para empezar a ser humano se vio seducido por ese breve oscurecimiento del día, en pleno día.
Al principio generó terror: el Sol moría como consecuencia del enojo de los dioses, y se preveían malos augurios. Acaso la infrecuencia del evento haya coadyuvado a que nuestros antepasados asocien estos eclipses con hechos negativos.
Hoy se sabe que no se producen debido a la ira de ninguna deidad, sino a la órbita de los cuerpos celestes involucrados, la Tierra y la Luna. De allí también que no se repitan tan a menudo. Y aunque ya no causan miedo, continúan despertando encantamiento.
A mediados del último mes de este pandémico año ocurrirá un eclipse total de Sol que tendrá en la Argentina -más precisamente, en la Patagonia- su zona de centralidad; es decir, donde más tiempo durará la totalidad del fenómeno y donde mejores condiciones astronómicas habrá para observarlo.
Y hasta ese Greatest Eclipse Point se trasladará el equipo de profesionales del Observatorio Astronómico de Ampimpa (OAA), responsables de coordinar una expedición a la cual puede asistir cualquiera que desee vivir la experiencia de presenciar este evento en el mejor lugar posible. “Nuestro observatorio hoy tiene una trascendencia nacional, desde el punto de vista educativo. A esta expedición en particular vamos varios tucumanos, pero también gente de todo el país”, le contó a LA GACETA el director del OAA, Alberto Mansilla.
Indicó que hasta ahora, además del personal del observatorio, se anotaron 19 personas de Buenos Aires, tres de Santa Fe, uno de Córdoba y cuatro de Tucumán. “Estaba previsto que venga gente de Brasil, pero lamentablemente, debido a las restricciones por la pandemia, no podrán llegar, así que aún tenemos lugares para quienes se quieran sumar. No es necesario que cuenten con conocimientos previos; de hecho, la mitad de los inscriptos son personas sólo interesadas en el fenómeno. Contamos con una estructura preparada para la familia; y van varios matrimonios con hijos”, precisó. Quienes quieran formar parte de la expedición deben anotarse en el sitio web https://www.cielosdeampimpa.com/.
Se trata de la segunda expedición que harán los profesionales del OAA. A las 17.40 del 2 de julio del año pasado habían sido testigos privilegiados del anterior eclipse total de Sol, que tuvo su punto de mejor ubicación en San Juan. Este año repetirán la vivencia: la Luna comenzará a bloquear el Sol exactamente a las 11.49 del lunes 14 del mes que viene.
“Haremos base en la ciudad de General Roca, en Río Negro, el sábado 12. A partir de allí se desarrollará todo el cronograma de la expedición”, contó Mansilla.
El sitio exacto donde instalarán el campamento es secreto. Esto se debe a que quieren evitar las aglomeraciones, para poder realizar los trabajos científicos con la mayor tranquilidad posible, y para preservar los sofisticados equipos que trasladarán en la expedición.
“De hecho, a los miembros del equipo recién les contaremos con exactitud dónde iremos cuando lleguemos a Roca, no antes. Sí podemos adelantar que el Greatest Eclipse Point queda en El Cuy, una zona desértica de la Patagonia, de unos 100 km² de extensión.
A ese lugar llegará la delegación, de unas 35 personas en total, hacia las 9 del lunes 14 del mes que viene. Y todos los equipos estarán instalados y listos para contemplar desde el instante inicial el fenómeno, que se extenderá durante unos 200 minutos. “A esa hora sucederá lo que nosotros llamamos el primer contacto; comenzará a aparecer una pequeña mordedura del disco del Sol: es la Luna, que en su órbita se va poniendo delante del Sol. Es un proceso largo, llamado fase de la parcialidad; en el ambiente se irá notando como un crepúsculo. Y a las 13.12 la Luna tapará totalmente el Sol”, contó Mansilla.
Eventos dentro del evento
Añadió que en ese momento se producen varios fenómenos astronómicos, muy interesantes. “Aparece la corona solar, que es esa atmósfera, ese halo blanco que rodea el Sol -allí se ven los campos magnéticos del astro-; y aparece, muy pegadita al borde de la Luna, la cromosfera, que es otra capa del Sol que normalmente no se ve; el brillo de la fotosfera no deja ver ni cromosfera ni la corona solar. Y, finalmente, como se ‘hace de noche’, aparecen las estrellas; y en pleno mediodía tenemos el cielo estrellado”, explicó el profesor tucumano.
Agregó que todo eso dura dos minutos, porque la totalidad del eclipse se extiende hasta las 13.14; y a las 14.40 todo volverá a estar nuevamente iluminado.
Recorrido del fenómeno
Mansilla explicó que el eclipse “entrará” por el océano Pacífico; más precisamente, por Temuco, en la Novena Región de Chile. Recorrerá en dirección sureste, e “ingresará” a la Argentina por Neuquén. “Allí hay un lugar increíble para verlo, que es el Parque Nacional Lanín, cerca de Junín de los Andes, supongo que mucha gente irá allí a verlo, porque paisajísticamente es un sitio muy lindo”, dijo.
El fenómeno “seguirá” su recorrido, y “entrará” a Río Negro por Piedra del Águila: “también allí seguramente irán muchas personas”. Luego, Mansilla contó que el eclipse “saldrá” por el océano Atlántico. “Las Grutas será otra localidad excelente para verlo, porque está muy bien posicionada respecto de la trayectoria del fenómeno”, avisó.
Regaló una buena noticia para los tucumanos. Si bien en la provincia no se verá un eclipse total, sí podrá observarse parcialmente el evento. “En Tucumán el Sol se ocultará un 48%. Si bien se dará al mediodía -es decir, estará sobre nuestras cabezas-, recomiendo, en la medida en que lo permitan las autoridades sanitarias, que busquen un lugar de observación donde el cielo se encuentre lo más limpio de nubes posible; por ejemplo, los Valles Calchaquíes”, aconsejó.
Detalló que en Tucumán el eclipse comenzará 23 segundos después de las 11.44; el momento de máximo ocultamiento (48%) se alcanzará casi a las 13.09, y finalizará hacia las 14.37.
Un plus
La expedición no acaba cuando finaliza el fenómeno solar. El grupo permanecerá en el campamento varias horas más, porque el cielo nocturno les tiene reservada otra sorpresa. “Una vez que termina el eclipse nos vamos a merendar por la zona -posiblemente a un sitio donde haya más sombra- y volvemos cuando se haya ido el Sol, porque esa noche habrá una lluvia de estrellas. Y el cielo de la Patagonia es fantástico; no sólo para ver las estrellas fugaces, sino también para realizar otras observaciones astronómicas: cúmulos estelares, la Gran Nube de Magallanes, la Cruz del Sur... Será una noche de mucha actividad astronómica”, celebró el director del OAA. Hacia la 1 del martes regresarán a General Roca.
La expedición hará su primer muestreo de información recabada entre los propios miembros. “El martes, después del almuerzo, mostramos todo lo que obtuvimos, las fotografías que sacó cada uno. Llevaremos tres telescopios para que los aficionados puedan sacar fotos con sus propios celulares”, anticipó.